martes, 12 de junio de 2012

Historia de guerra

Todas las personas se convierten victimas de sus ilusiones, cuando realmente se dan cuenta que se acabo la magia tardan en superarlo..

Te habia escuchado como otros dias, esa voz tan profunda y llena de vida pero no te llegué a ver; mi corazón esperaba fuertemente un ataque venidero que jamás llegó, su posición se hizo cada vez mas antigua y cada vez que queria tomar otra posición se demoraba tanto, pobre de el...

Intenten apartarlo para poder hablar del tema pero el vivia en dos mundos, en el mío y en el que había creado para ti;  preocupada y consternada quizè someterlo a juicio con la conciencia pero nunca llegó a pesar de haberle otorgado invitación.

Esta es la noche en donde veo a mi cerebro crear peliculas con nosotros y al otro extremo veo a mi conciencia esmerandose por crear lagunas mentales; cada vez estaba mucho mas cerca de abrazar a mi conciencia hasta que un destello de tu mirada estallo en mi cerebro que con su diferencia el resto se convirtieron en feligreses.

Si, en ese momento no podia levantar la mirada y recibir algun signo de repulsión, intente vacilante mantener mi calma sin participar con la verguenza por tremendo show. La misión que venia discutiendo continuamente era mantener en reserva lo que era bipolar por excelencia podía ser encantado y tranquilo pero también podía ser desesperado y loco; uno de mis dilemas filosoficos en aquel instante era separar mis planes de mi esforzada alma equilibrada, afligida y casi sin esperanza llegué a mi cama transformada en un feligrés de la conciencia mia.

En aquel momento preferí aceptar mi soledad perpetua y ser esclava de mi conciencia pues ya la había puesto a prueba y no habías podido con ella. Argumente en silencio el motivo de ignorarte amargamente, pero tu voz volvió a callar mi memoria, calmó la historia y protegió a aquel corazón rebelde como si el tan ingenuo que es pudiese defenderse de lo que buscaba, tan tonto el...

Sabía a que se referia pero sus argumentos no fueron suficientes para asumir la responsabilidad de decidir y manejarme a su antojo,  parece que le diste fuerzas para que sea un lider natural que sentia podia luchar con las cicatrices del pasado y con los miedos del futuro y me sorprendí; iba a celebrar una convención en tu nombre y la conciencia intento detenerlo sin nada que poder hacer, la realidad era simple el se había encantado con la misma energía de tu mirar que sentía ganas de luchar y creía que podía defender a todos, exagerado por cierto.

El sentido que le diste por cierto tiempo generó la modificación en ciertos sentimientos, la zona completamente oscura en donde se encontraba mi racionalidad quería conocer la luz, la connotación con la que escribía esta historia me parecía científica, y el alma empezo a bordearse de fuego, nada exagerada, intuitivamente escondí a mi conciencia entre una serie de notas flojas que la mantuve a salvo de cierta alegría que se vivía alrededor.

El vertice de mi luz se había aclarado en tantos actos que me perdí, con mucho respeto pretendía ser escuchada pero nadie me dio permiso, seguí trabajando en las historias desordenadas de un poeta y se fueron pasando los días; lo difícil fue mantener con cordura mis sueños que al parecer quería que escenificaramos las escenas de sus cuentos de hadas, la lecciones por aplicar eran mas complicadas que las lecciones por aprender.

Dejé que todos fueran danzando alrededor del fuego mientras yo me concentranba en mi conciencia o almenos la parte cuerda que quedaba de ella; de pronto en casa la energía cambiaba lentamente y esotericamente supe que había ganado yo y que tenía razón lentamente se apagaron las luces y todos regresaron como veteranos de guerra a apagarse lentamente en sus lugares respectivos, el corazón fue el último en regresar con una carta bajo el brazo que con lástima tuve que leer.

Hoy me rindo no porque quiero, me rindo porque los puentes se rompieron me exigí y me engañe como muchas veces habia pasado, pensé que sería diferente y se que siempre digo lo mismo pero esta vez planeo regresar a mi sitio y darte las últimas fuerzas pero jamàs será igual.... Volví a mirar el rastro rojo que se alejaba de mi y vi al corazón parado con una sonrisa torcida y bastante lastimado, corrió una lágrima sobre el y supe que con eso se despedía con grandeza.

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