sábado, 16 de junio de 2012

La tua cantante

El pasillo se hace cada vez más largo y mas estrecho, la fuerza irrevocable de mis piernas me sorprende cada segundo, los latidos del sonoro corazón llenan el pasillo con melodías tuyas, era mejor darme cuenta que el estaba encantado por encontrarte, ciertas partes de mi miedo desean sentarse pero esto es mas fuerte; sigo escuchando como me llamas, de la manera más dulce...

Cuanto caminaste mientras esperabas? Cuantas veces me aloje en tus sueños? Y estoy aquí sintiendome miserable por dejar que el diluvio del tiempo ahogara el perfecto estado en el que nos encontrabamos; desciende de mis recuerdos un lienzo con velas al viento y adornan las tantas veces que fuimos excluidos de todo alrededor para ser solo aquellos perfectos extraños hablando de todo y de nada, mientras entre mi crecía un deleite casi magico al explorar tu mirada minusiosamente, en mi afán me perdí y tus expresiones me embelesaron, tuve cierta inclinación pecaminosa por recostarme en tu hombro, pensé que iba a regresar rapidamente pero con mucho exito me convenciste de todo; aquellas criaturas alrededor jamás entenderán aquel centellante encuentro, quizá vean con algo de sorpresa y den vueltas alrededor de nosotros, pero la eternidad en aquel momento había creado tantos hilos de fuego que era incapaz de salir a la intemperie.

El extasis y la morfina de tu calor calmaron mis temores y fui capáz de tocarte con exito para terminar de calmarme, para flotar un poco más, llegó a pasar entre mi melancolía el miedo de envenenarte cuando logré tocarte con la punta de los dedos; tendría una memoria que sumergiría en mis sueños para crear las historias mas hermosas, tan autenticas que lentamente se convertían en halos de luz en aquel pasillo inacabable

Hoy temblorosa mientras me pierdo intentando encarnar los momentos vividos organizo todo para mañana, todo el tiempo apareces entre mi almohada y mi ventana, desde la primera vez que me dejaste turbada sentí que todo los problemas se descocían pues ya había encontrado una calma tan especial que amontonaba dulzura y voluntad para sonreir frente al cielo y su oscuridad interminable; mi sutil conciencia estaba desesperada rasgando las paredes de mi interior mientras se preguntaba ¿porque? Se pasó tantas noches intentando comprender como pasó pero algo había allí definitivamente, me regalo ilusiones con un poco de pesar y solo estaba metida recortando breves escenas para crear una historia más consistente, mi conciencia trato de advertirme desde el umbral pero ya era demasiado tarde, ya te había encontrado.

Tuve tanto miedo y digamos que aún tengo miedo, por las veces que el corazón latia desbocadamente y escucharás, solía esperar con el amanecer los fragmentos que me ofrecías para seguir armando la historia, porque procuraba desear a diario que estuvieras aquí y exponerme a dicha secuencia tan hermosa, quizá mi expresión embrutecida te hizo reir unas cuentas veces, solo bastaba asomarme por el vitral y verte, no poder aguantar la risa deseando un rescate de mi dignidad cuanto antes, ya había caido en la proximidad de congelarme, dedusco ahora que eso no era lo peor, ya pude conocer el calor de tus labios y siglos de muerte efimera desaparecieron en lo que pareció la agonía más dulce que humeaba lentamente.

Despertar con cierta pasividad y ver en que consistía la los dias anteriores antes que llegaras, intente engañar a mi memoria y me sentí ridícula, me sentía tan indefensa en este mundo hostil, rodeada de oscuridad hasta que tu tibieza derrotó las tinieblas y fue reconstruyendose todo, con todo lo que tengo que contemplar, tus palabras que suelen ser música nueva para mi y hasta se me olvida respirar, llegaste en el momento indicado a darme todo lo que necesitaba y aún puedes ver que no he hecho nada por ti, màs que sonreir porque sé que te buscaré y te encontraré...

No hay comentarios: